¿Alguna vez te ha pasado que te despiertas por la mañana con mucha energía para empezar a trabajar, consciente de todo lo que te espera, pero al final del día te das cuenta de que no has logrado completar la mitad de las tareas porque te faltó tiempo? A todas nos ha pasado, lo admitimos. Y más de lo que nos gustaría.
La clave está en la mala gestión del tiempo y la falta de organización, lo que nos impide ser tan productivas como podríamos ser. Para evitar esto, existen diversas técnicas de productividad, desde el famoso método Pomodoro hasta otras menos conocidas como la técnica de «comerse una rana» o el modo monje recomendado por psicólogos.
### Descubre el «timeboxing» y su impacto en la productividad
Hoy vamos a hablar de una de las técnicas de productividad preferidas por Michelle Obama, el «timeboxing», que te permite organizar tus tareas de manera que conciliar el trabajo y la vida personal sea mucho más sencillo. El objetivo principal es evitar la procrastinación y gestionar de forma eficiente el tiempo.
Al igual que el método Ivy Lee, el «timeboxing» se basa en organizar las tareas según su importancia y los resultados que pueden aportar, evitando que las tareas menos relevantes absorban nuestro tiempo.
### Cómo aplicar la técnica de «timeboxing» en tu día a día
Esta técnica surgió gracias a James Martin, autor del libro «Desarrollo rápido de aplicaciones», donde la utilizaba como parte del desarrollo ágil de software. Consiste en asignar un bloque de tiempo determinado a cada tarea, dedicando al inicio de la jornada unos 15-20 minutos para distribuir las tareas y asignarles el tiempo necesario.
Durante ese tiempo, es importante centrar toda tu atención en la tarea sin distracciones. Puedes utilizar una agenda o aplicaciones como Asana para organizar tus tareas, o simplemente un folio en blanco si prefieres la sencillez.
La personalización es clave en esta técnica, ya que eres tú quien valora cuánto tiempo necesitas para cada tarea y estableces los momentos en los que debes realizarlas. Distribuir correctamente las tareas y realizarlas en tu momento más productivo son fundamentales para que la técnica funcione.
En resumen, el «timeboxing» es una excelente herramienta para mejorar la productividad y gestionar de manera eficiente el tiempo. Con un poco de organización y dedicación, puedes lograr completar tus tareas de forma más efectiva y disfrutar de un equilibrio entre el trabajo y la vida personal. ¡Pruébalo y verás la diferencia!